La verdad es que no era la idea, pero un chavalito muy majo nos convenció cuando pasábamos por la puerta diciendo que la comida estaba muy buena, que había cocina francesa, española y fusión, que la decoración era de Armani, que el plato más caro era de 14€, que el servicio era excelente y que si no nos gustaba le podíamos fusilar a la salida...¿Qué haces en esos casos?, pues entrar a cenar, está claro.
Cenamos dos personas y pedimos un primero para compartir, un segundo cada una y un postre para compartir también. Yo bebí dos coca-colas y ella una copa generosa de buen vino:
Mi-cuit de hígado de pato con manzana, queso de cabra gratinado y cebolla caramelizada. (Riquísimo)
Bacalao a la miel con crema de calabaza. (Impresionante)
Rape de algún modo que no recuerdo. (Rico)
Cheese cake de la casa. (Riquísimo)
Total de la cuenta 53€ (26,50€ por persona)
El sitio supertranquilo, hipermoderno, con velitas, tonos neutros, con un servicio estupendo y una cocina muy rica.
No os lo podéis perder...
No hay comentarios:
Publicar un comentario