Día despejado, bastante soleado y con viento.
Solo hay siete monasterios en el mundo que elaboran su propia cerveza, este es el caso de la cerveza de hoy, Orval. Cerveza de color albaricoque, con espuma no demasiado abundante pero sí duradera, intensamente amarga, con aromas de frutas y especias. La amargura seguramente se deba a que tiene una segunda y tercera fermentación espontánea que acaba con todos los azúcares naturales. El monasterio Orval fabrica y comercializa también sus propios quesos.
Dicen que en frente de la Abadía de Orval existe un local "L`Ange Gardien", que sirve los "menús Orval", a la antigua usanza: pan, queso y cerveza, todo de la Abadía... un placer.
Cerveza de trigo que se condimenta con cilantro y cáscara de naranja, sin filtrar y por lo tanto pálida y opaca. 4,5 % de aocohol. Hoegaarden lleva el nombre del lugar donde se elabora. Su fabricación se remonta a 1445.
El pueblo de Hoegaarden había sido conocido desde la edad media por su elaboración de cervezas blancas. En el siglo XIX la aldea tenía 13 fábricas de cerveza y 9 destilerías, pero no fue hasta 1965 que Celis Pierre, un lechero, decidió recuperar el estilo tradicional y comenzar la aventura en su pajar. Es por ello que se utilizan todos los ingredientes tradicionales en su elaboración.
El pueblo de Hoegaarden había sido conocido desde la edad media por su elaboración de cervezas blancas. En el siglo XIX la aldea tenía 13 fábricas de cerveza y 9 destilerías, pero no fue hasta 1965 que Celis Pierre, un lechero, decidió recuperar el estilo tradicional y comenzar la aventura en su pajar. Es por ello que se utilizan todos los ingredientes tradicionales en su elaboración.
Que maravilla!!! Que dominio de la birra !!! .
ResponderEliminarAsí, bien explicadito todo, dan muchas más ganas de tomársela y probarla.
;-) Pues nada, los billetes son baratitos y las cervezas te esperan, yo me ofrezco de guía.
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